La ciudad puerto fue el epicentro del conocimiento y la innovación con la realización del Mundial Escolar de Ciencia y Tecnología, encuentro internacional que reunió a más de 60 equipos escolares provenientes de nueve países de América Latina.
El evento se desarrolló entre el 14 y el 17 de octubre en la Escuela Santa Ana, ubicada en el corazón del Barrio Puerto, transformando este espacio patrimonial en un verdadero laboratorio de ideas y colaboración científica.
Organizado por la Ruta Científica Internacional Escolar (RCIE), ONG con presencia en toda Latinoamérica y el Caribe, el encuentro tuvo como objetivo fomentar la investigación, el pensamiento crítico y la creatividad en niños, niñas y jóvenes, a través de proyectos enfocados en ciencia experimental, innovación tecnológica, sostenibilidad y desarrollo social.
Un encuentro multicultural en el corazón del puerto
Durante cuatro días, delegaciones escolares de Brasil, México, Perú, Ecuador, Paraguay, El Salvador, Honduras, Argentina y Chile compartieron sus proyectos científicos y tecnológicos en un ambiente de intercambio, aprendizaje y sana competencia. La experiencia incluyó exposiciones, premiaciones y actividades de integración, que permitieron a estudiantes y docentes conocerse, aprender y valorar la diversidad cultural y educativa de la región.
En palabras de Javier Ramírez, gestor de recursos y alianzas del Mundial, este evento marcó un hito para la ciudad. “Este Mundial de Ciencia y Tecnología Escolar es un hito clave en Valparaíso. Lo desarrollamos en el casco histórico, en un barrio patrimonial, y fue un encuentro multicultural con más de 150 personas movilizadas entre países y regiones. Hubo entusiasmo, integración y una energía muy positiva entre todos los participantes.”
Además de las exhibiciones científicas, se realizaron jornadas de integración en Caleta Portales y un recorrido cultural por Viña del Mar, gracias al apoyo de Valparaíso Creativo, programa estratégico de CORFO.
Ramírez destacó la colaboración de instituciones y personas que hicieron posible el encuentro: “Queremos agradecer a Valparaíso Creativo, a su gerente Alexandra Garín, por su apoyo en la organización del tour y en la difusión de esta experiencia. También al director regional de CORFO, Etienne Choupay, y al Seremi de Ciencias, Rodrigo González, quienes creyeron en el proyecto y nos ayudaron a sacarlo adelante.”

Ciencia, educación y colaboración ciudadana
El Mundial Escolar fue posible gracias a la suma de esfuerzos de distintos actores locales, desde el apoyo logístico de transportistas porteños hasta la colaboración de la Municipalidad de Valparaíso y la Escuela Santa Ana, que abrió sus puertas para recibir a las delegaciones internacionales.
“Este proyecto lo hicimos las personas, no las instituciones. Lo logramos con voluntad, colaboración y amor por la ciencia y por Valparaíso”, agregó Ramírez.
El evento se proyecta como el inicio de una tradición anual en la región, con miras a consolidarse como una plataforma de cooperación educativa y científica entre países latinoamericanos.
“Queremos que este Mundial siga creciendo. La idea es mantenerlo en Valparaíso, fortalecer las redes y atraer cada vez a más jóvenes y docentes comprometidos con la ciencia, la innovación y la educación transformadora”, concluyó Ramírez.





