Atípica es una agencia que ya tiene 6 años y medio de historia y todo comenzó como una agencia de retoque. Fernanda Soto es quien comenzó esta idea que hoy abarca a un equipo interdisciplinario de 15 personas, todas mujeres.
Ubicadas en Cerro Concepción, mirando al mar desarrollan soluciones creativas para clientes de Chile y el mundo. ¿Qué hacen? Comunicaciones, diseño, marketing digital y otros servicios lo cual descubrimos en entrevista con parte de su equipo: su fundadora y Directora Ejecutiva, Fernanda Soto; la Directora de Proyectos y comunicaciones María Gracia Sandoval; y la Gerenta General, María Verónica Almeida.
¿Cómo partió Atípica?
-Terminé el colegio y me fui a estudiar fotografía a Barcelona, donde trabajé muchos años. Siempre me relacioné al mundo de la moda o el retail. Después de un tiempo tenía ganas de volver a mi casa a Valparaíso. Cuando me vine, entré en una crisis vocacional porque no había mucha pega y me di cuenta que el sector de la Economía Creativa era muy precario, desde la fotografía a otras disciplinas. Es una industria en incipiente desarrollo.
Me preguntaba por qué todas las agencias grandes están en Santiago, siendo que Valparaíso es una comuna conocida por su creatividad. Cuántos pintores, fotógrafos o poetas vienen acá pues es una ciudad que conmueve mucho, y eso favorece mucho el ámbito creativo.
Partimos con un cliente de España que me contactó para hacer retoque a sus fotografías. Es algo mucho más técnico desde lo creativo. Cuando me llegó ese trabajo era demasiado para mí, pero me parecía la única oportunidad de trabajar acá y que me pagaran bien. Fue entonces que me planteé iniciar actividades como empresa y contratar a dos personas más para prestar este servicio.
¿Cuál es su motivación principal con este proyecto?
-Desde lo anterior que nos dedicamos a los servicios creativos, no solo a la fotografía: vendemos campañas comunicacionales, diseño gráfico, marketing digital y en esa línea.
Con Atípica, tengo la visión de generar un espacio que no fuese precario, de no pagar mal y tener buenas condiciones, entonces, fui invirtiendo lo poco que tenía. Igual es un emprendimiento, no tenemos socios ni nada, así que fuimos construyendo Atípica hasta hoy, que contamos con 15 personas. Somos muy fieles a los principios de trabajo colaborativo, de manera horizontal y con enfoque de género e hincapié en los derechos humanos en todo lo que hacemos.
¿Con quienes trabajan principalmente? Cuéntanos un poco más sobre los servicios y empresas con las que se vinculan
-Estamos trabajando una campaña con ONU Mujeres, clientes que nos permitan tener la empresa que queremos tener. Tenemos hoy una gran diversidad de clientes porque hay que pagar sueldos, pero nuestro foco son organismos multilaterales, empresas B que tengan afinidad con nosotras, que entendemos la comunicación y publicación como una herramienta para generar cambio social. Queremos usar la comunicación y marketing para la transformación y hacerlo desde Valparaíso.
¿Cómo explican la creatividad de sus procesos? Quizás alguien que no entienda mucho el rubro de las agencias no pueda comprenderlo totalmente.
-Todo parte cuando nosotras recibimos la pedida del cliente, el brief. Nuestro cliente usualmente viene con un problema y tenemos a nuestro equipo interdisciplinario para hacer un brainstorming entre todas y generar soluciones creativas a estas situaciones. Como inventar una página web, o comunicar a través de una campaña o producto creativo. Esto es transversal a todos nuestros procesos, y buscamos una forma no convencional de hacer las cosas.
¿Por qué es importante la creatividad en su vida?
-Mari: Particularmente en mi día a día aplico la creatividad. En mi caso ser extranjera te obliga a inventar mil cosas para poder darse a entender y sobrevivir. Ser extranjero te invita a que tu día a día esté lleno de creatividad. También depende de la forma de ser, para quienes somos inquietos y nos gusta aprender nuevas cosas, experimentar y conocer cosas nuevas también alimenta nuestra creatividad y rubro. Es un movimiento constante de cosas.
Fernanda: Mi rol ahora es mucho más de gestión al ser Directora Ejecutiva, pero ahí igual se requiere creatividad, en el fondo al buscar alternativas para lo que quieres realizar. Por ejemplo, cómo sobrevivir y mantener el equipo en pandemia. En nuestro caso hicimos todas un brainstorming en ese momento y salió un plan, el “Plan Violeta” que es un plan creativo comercial para no echar a nadie cuando se fueron inversionistas. Se requiere creatividad para armar algo que te guste, de tu área, y que te dé para vivir desde Valparaíso.
María Gracia: Yo soy comunicadora social, y se ve como un área alejada de la creatividad, pero también se vincula en todos los procesos y personas de la organización para sacar el potencial al equipo.
Mencionaron a las Industrias Creativas, ¿cómo ven a esta “industria” y cómo creen que impacta en el territorio?
-Definitivamente hay, por ejemplo nosotras exportamos servicios creativos, cuyo desarrollo está directamente relacionado a la calidad de vida de la gente. La industria o los y las creativos aportan a un bienestar social a largo plazo. Los recursos deberían estar en potenciar a Valparaíso como un destino a nivel mundial, donde la gente puede venir a contratar servicios creativos, desde Diseño Gráfico hasta música, artes escénicas, entre tantas otras. Creo que anhelamos que la gente vea a Valparaíso como este núcleo, nosotras trabajamos con clientes que buscan la “creatividad latinoamericana”, por lo que creo que necesitamos un capital creativo de clase mundial acá en Valparaíso para que se inyecten recursos y hayan más agencias, gremios de artistas y tengamos una oferta exportable fuerte. No es sólo generar empleo, sino que también apostar por la sustentabilidad y por la sociedad.
Es importante transmitir esta idea, con condiciones dignas para desarrollar la misma creatividad con impacto para el entorno. Y es importante hablar sobre los beneficios de la Economía Creativa para el país.
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