Andrés Urzúa de la Sotta es escritor y editor. Estudió Licenciatura en literatura y Magíster en Literatura, especializándose en literatura chilena. Junto a Nicolás Meneses tiene Provincianos Editores, pero además está en más proyectos. “Tengo una editorial en Limache, que empezó sus publicaciones el 2020, pero se constituyó formalmente el 2022, lo que es más nuevo. En esa misma comuna participo en la Feria Arboleda que se hace en la Plaza de Armas de la ciudad, que fue hace poco”.
“Por otra parte, soy uno de los directores de la Fundación a Cielo Abierto donde hacemos el Festival de Poesía a Cielo Abierto, del que ya hemos hecho 10 versiones. Ese proyecto está súper vinculado con Valparaíso y se realiza en el espacio público, con lecturas en lanchas en la noche.
Finalmente estuve en el equipo que armó una Feria en Viña del Mar que se llama Marea del Libro y se hizo a fines del año pasado en la ciudad jardín, con enfoque cultural y ciudadano, es decir que también es un espacio de presentación y programación cultural con talleres para distintas edades”.
¿Por qué decidieron hacerlo ahí mismo en Viña del Mar? En cuanto a la Marea del Libro.
-Fue a través del vínculo con la Corporación de Viña del Mar, surgió la posibilidad de trabajar en conjunto a ellos, y a través de ellos levantamos los fondos regionales para Marea del Libro.
Con la fundación, a Cielo Abierto ¿en qué están trabajando?
-Ahora estamos con un libro de los 10 años del Festival de Poesía, que es un libro principalmente de fotos del festival con textos breves sobre su historia. Además, a través de la fundación trabajamos con Marea del Libro y este año ya tenemos el financiamiento para la edición del festival.
¿En tus palabras, cuál es la misión que tienen con la fundación?
-Tenemos un enfoque vinculado directamente con el fomento lector. Nosotros somos escritores, los cuatro que formamos parte de la fundación, con un pie firme en la poesía. Entonces lo que hacemos es atraer lectores, promover la lectura. La idea es posibilitar el encuentro entre las personas y el libro o la literatura, por eso la necesidad de salir al espacio público, y o de convocar a comunidades con necesidades puntuales como en la Marea del Libro.
En ese sentido, ¿qué nos puedes comentar sobre la Marea del Libro?
-Marea del Libro además tenía un enfoque en destacar artistas de Viña del Mar, haciendo un proyecto redondo con contenido, con una curatoría más fina, cultural, darle ese enfoque. Entonces usamos esta idea en la programación, donde se reflexionaba sobre figuras de distintos ámbitos del arte, como Aldo Francia en el cine, o sobre María Luisa Bombal en la literatura, o uno sobre poetas de la Región.
Sobre la editorial, Provincianos Editores, ¿cuál es el enfoque que tienen en sus publicaciones?
-Tenemos más de 30 libros publicados, principalmente de literatura, y particularmente de poesía y narrativa chilena. También tenemos una traducción, pero lo principal es nacional. Y también estamos abordando lo que es cómic y narrativa gráfica. Hemos publicado algunos títulos, abriendo una colección anexa que se llama Mangaline. Y ahora estamos trabajando en Memoria, por ejemplo con el libro del Festival a Cielo Abierto, otro sobre poetas chilenos, otro sobre el diseñador Mauricio Amster, así inaugurando esa línea de memoria.
A veces trabajamos con fondos, pero también hemos arriesgado capital, y hay libros que se venden, entonces ahí vamos equilibrando.
¿Tienen algún criterio para con quienes eligen publicar?
-Hay en teoría criterios, pero depende de si nos gusta el texto o no. Claro debemos pensarlo como un proyecto sustentable, pero así hemos definido ciertos criterios como digo. Entonces según el tipo de libro que nos interese publicar, vemos el tipo de recurso que debemos obtener, y así.
Tenemos un interés muy específico por la vinculación entre deporte y literatura, en diversos géneros. Eso es algo que queremos publicar, por ejemplo. Y también el pensar la provincia (lo no capitalino) como un territorio por abordar, pero eso se nos ha ido desdibujando, que de acuerdo a la realidad, se van acomodando. Así que lo principal es que nos guste el texto y sea un aporte cultural.
¿Cómo aportas a la Feria Arboleda de Limache?
-Bueno ahí entré por Diego Alfaro, poeta de allá, y me hice parte colaborando desde una parte, por ejemplo desde el diseño. Siento que es un proyecto muy comunitario, que se levanta muy dentro de las posibilidades, lo que es bello, tiene el apoyo de la Municipalidad y eso es importante y se puede aún construir algo un poquito más sólido. Siento que es bueno que cada comuna tenga su feria del libro, ya que se fortalece el ecosistema literario local, ya que es un gran espacio para el mundo editorial.
¿Cómo ves la lectoría en Chile? ¿Qué crees que se puede hacer para aumentar las audiencias?
-Yo sospecho por mi experiencia es que hay que seducir de alguna manera al público, ya no funcionan las típicas actividades de literaturas, hay que probar nuevos formatos creo yo. Siento que esas son las actividades que logran conectar con otros públicos no lectores, donde le ofreces un espacio a la ciudadanía y le ofreces algo más. Es una alternativa. Como es el caso de los paseos en lancha del Festival a Cielo Abierto, mucha gente va por la experiencia, y eso creo que tiene más impacto en convocar a personas que no necesariamente están conectadas a la literatura.
En el ámbito editorial, siento que la vinculación con el libro objeto puede ser algo interesante para quienes no están tan familiarizados con los libros. Me pasó con mi experiencia en la editorial Libros del Pez Espiral, que se dedica a este formato, la gente se acerca. Siento que hay un público cautivo que va a leer, la pregunta es cómo incorporamos a más gente para que se interese por la lectura y eso implica salir de los espacios tradicionales de difusión.
Lo otro puede ir por las temáticas, como nuestra apuesta de ir por libros relacionados al deporte, ahí hay que ir viendo la mejor estrategia. La cosa es invitar a otros para que se involucren.
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