Por: Valentinne Rudolphy

“The struggle to understand” (la lucha por comprender) es el documental que produjo la periodista chilena Caterina Barbera, quien hace seis años se fue a Estados Unidos a estudiar y luego trabajar. Hoy el resultado, emitido por ABC News donde ella es parte, está nominado a los Premios Emmy a Noticias y Documentales, en la categoría “Mejor Especial (Reportaje) de Televisión”.

Se trata de un reportaje de 27 minutos que retrata la vida actual de la comunidad de Uvalde, en Estados Unidos, posterior a un tiroteo escolar que terminó con la vida de 21 personas. Un trabajo realizado por un equipo de siete personas y que compite con canales como NBC, Vice y CBS.

Caterina es de la Región de Valparaíso y estudió periodismo en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, por lo que tomamos contacto con ella desde Nueva York para conocer más detalles de su carrera y nominación.

Cuéntanos un poco de ti y de qué estás haciendo actualmente

-Soy parte del noticiario del canal ABC, donde estoy desde mayo del 2022. Hace 6 años me vine a estudiar un Máster de Periodismo con especialización en documentales, lo que me interesó mucho porque era algo que quería aprender. Accedí a unas becas y me vine primero a eso, y estuve trabajando en la universidad, y trabajé documentales. Luego me pilló la pandemia, donde tuve que volver a Chile por la beca mientras trabajaba en línea. Me involucré en otros proyectos y así hasta ahora, que volví hace un tiempo y entré a ABC.

¿Cuál es tu relación con la televisión?

-Siempre he estado vinculada a la tele. Antes quería estudiar teatro, me gustaba el cine… era algo que por miedo no lo estudié, a la vez me gustaba mucho escribir y la no ficción, por lo que pensé que el periodismo era un camino que me permitía explorar lo que me gustaba. Siempre en la Escuela intenté involucrarme en lo audiovisual. Y cuando iba en tercer año postulé a Mega, donde estuve trabajando varios años incluso después de graduada. No es que me gustara la tele específicamente, o sea salir yo en pantalla, por lo que intentaba enfocarme en el reportaje para ir más en profundidad en los temas, donde pude explorar harto en cuanto a investigación, siento que ahí comencé a pensar más visualmente y me enamoré del documental. Después de eso me vine a Columbia, donde todo se une. Creo que todo el training del documental te da buen training como productor.

¿Cómo se logra plasmar tu mirada en tu trabajo periodístico? ¿Cómo incorporas estos elementos que fuiste desarrollando?

-Creo que mi mayor crítica en los documentales, que hoy se hacen mucho, es que no siempre el centro está en el entrevistado, se cruzan hartas barreras según mi formación periodística, como cuando se interviene mucho en la producción. El documental tiene una tradición periodística y hay que mantenerse en sus márgenes éticos. Con respecto a eso, pienso que mi mirada y mi manera de contar las cosas va desde la humanidad. Intento contra una historia desde el acercar a las personas a una realidad a la que no tienen acceso. Por ejemplo, en el documental nominado, The struggle to understand, era un tema peliagudo ya que tocaba las armas en un estado como Texas, por lo que quise mostrar el daño detrás de esa realidad para que se logre empatizar. Creo que ese es mi sello: tratar de permitir a la audiencia cuestionarte cosas, plantear temáticas y generar un cambio desde la verdad, poniendo el amor y la intimidad por delante.

Por otra parte, siento que uno con el tiempo afina el ojo, y se adoptan referencias visuales o en la forma de entrevistar. Entiendo qué lente puede lograr algo, o cómo aporta la luz, de manera que se transmita la verdad de esa historia. La idea es generar una estructura de guión y visualidad que se combinen y potencien.

¿Es muy distinto trabajar en Estados Unidos?

-Yo me fui muy a gusto con el trabajo periodístico en Chile, quizás es por nuestra historia que el periodismo tiene un rol importante en nuestra sociedad, al menos así lo sentí yo trabajando allá, buscando dilucidar verdades. Hay una tradición. En Estados Unidos hay una mezcla, y los canales tienen tendencias muy claras en cuanto a política por ejemplo. 

Sobre tus otros trabajos audiovisuales, ¿nos podrías contar?

-Trabajé en un documental que ahora está en edición, donde trabajé como co-editora y productora, que trata sobre una visa que tenían salvadoreños, haitianos y más nacionalidades, hasta que Donald Trump la revocó y se tuvieron que ir después de años de un día para otro, dejando a sus vidas y familias atrás. Captamos el drama de esta separación y la lucha por mantenerse en Estados Unidos. Es una investigación de cómo se llega a esa decisión. Eso debería salir en enero o febrero del 2024 en la tv pública y ojalá en festivales.

“Sansón y yo” es otro documental en el que participé, que habla de un inmigrante que se vio involucrado en un crimen, por lo que fue encarcelado por ser un partícipe pasivo de ello. Se repasa la historia de su vida, y fue un trabajo hermoso que estuvo en el Festival de Tribeca en Nueva York, estuvo en el Festival de Sheffield donde ganó mejor documental, y ha dado varias vueltas. Es del director mexicano Rodrigo Reyes.

Además fui productora y asistente de dirección de un corto que grabamos en Nuevo México con una amiga, y este estuvo en el Festival de Santa Fe de Nuevo México y en otras instancias. Fue mi primera experiencia con un gran equipo, muy distinto a lo que es la no ficción. Fue hermoso. También es una historia de inmigración, que es algo que he cubierto mucho y me apasiona mucho desde que llegué acá.

¿Nos podrías contar un poco de tu propio proceso de migración?

-Ha sido muy difícil. Yo soy igual una persona privilegiada y entiendo eso, desde la educación a otras cosas, aún así es súper difícil y muy caro. Los procesos son complejos, se hace difícil venir y quedarse. Por eso creo que también me apasiona mucho el tema.

Con respecto al reportaje y a la nominación, cuéntame un poco más de eso.

-La nominación es al reportaje en sí y al equipo tras ello. Lo siento muy mío porque lo co-escribí con una colega, lo edité, fui a grabarlo, por lo que es muy propio. Además están los corresponsales, el editor, hay varias personas. Previo a esto, participamos también en el proceso de nominación, no sabíamos que terminaríamos nosotros nominados, lo supimos recientemente. Ahora estamos a la espera del siguiente paso, hasta los premios que son el 27 de septiembre en Nueva York.

Puedes ver el documental aquí