Con el espíritu de ser un espacio de encuentro y producción para la música, se gestó Casa Almendral. Marcelo Morales es el personaje central en esta gestión, que consta de una sala de ensayo y Estudio de Producción Musical dedicado a brindar soporte y sustento a músicos de Valparaíso y regiones.
Marcelo Morales es músico aficionado y técnico en sonido. Desde el 2003 se dedica al registro de músicos de forma independiente. Tenía un estudio en cerro Barón, cuando aún la escena era muy precaria. “Me tocó trabajar con Macha, Ocho Bolas y muchos otros artistas”.
Desde el 2017 venía participando en varias instancias y capacitaciones de IMUVA, y ahí apareció esta idea de Casa Almendral, que desde el año 2018 hasta la fecha se ha consolidado.
No han tenido tanto tiempo para probar debido a que desde el 2019 el Estallido Social y la pandemia han complicado su trabajo presencial, pero siguen en pie buscando vías de colaboración en línea, posproduciendo grabaciones previas y prestando otros servicios dentro de su capacidad.
La ubicación de Casa Almendral es clave: está ubicado en el casco histórico de Valparaíso, a pasos de la Avenida Argentina, en Chacabuco 2883. Acá la idea es que “los artistas puedan ir y encontrar de todo”.
Hoy Marcelo está ideando derivar el proyecto y combinarlo con elementos de innovación. Sigue trabajando en línea, con las limitantes que esto tiene para su labor. Y en especial: el espacio, servicio y equipamiento que tienen es de primer nivel, y no pueden usarlo en toda su capacidad hoy en día.
Esto significa un obstáculo, pero no es limitante para su propósito: en palabras de Marcelo buscan “Posicionarnos dentro de la región como un espacio que reafirme la identidad cultural de Valparaíso. Ser un agente impulsor de la creación artística. Queremos trabajar con diferentes propuestas musicales, potenciando la creación con las herramientas tecnológicas para mejorar el resultado tratando de representar siempre la multiculturalidad de Valparaíso”.