Conversamos con Ricardo Solís, Ingeniero en Alimentos de la PUCV. Llegamos a él debido a su trabajo en BrewDesign, una innovadora propuesta que aporta a la especialización en torno a la cervecería artesanal en Chile. Se trata de una pre-academia con cursos que preparan a futuros jueces y maestros cerveceros a nivel internacional, y todo en línea. ¿Cómo surgió esta idea? 

 

– Ricardo, ¿de qué manera llegaste a formar lo que hoy es BrewDesign?

Hacia la parte final de mi carrera tuve unos ramos vinculados a la microbiología de los alimentos. En esos ramos comenzamos a hacer todo tipo de alimentos fermentados, incluyendo la cerveza, donde me fui dando cuenta de que había todo un mundo en torno a la cerveza artesanal y quería aprenderlo. Ese interés me llevó a Inglaterra, buscando conocer más del proceso.

 

– Ahí nace tu “interés” por la cerveza, ¿y luego eso dónde te llevó?

– Después de titularme el 2002, estudié un Diplomado de Practical British Brewing en Inglaterra en el 2004. Esto me llevó a que en mi retorno a Chile comenzara a hacer un par de marcas de cerveza, como Cerro Alegre el 2005 y Cerveza de Autor el 2007. Ambas estuvieron funcionando hasta el 2015, y ese año me hice cargo del Instituto de Cerveza de América. Continué desarrollando ese interés en mi profesión.

– ¿En qué consiste BrewDesign?

– Nació el 2012, con el propósito de apoyar a nuevas cervecerías, mientras iba creciendo el interés por este rubro en Chile. Principalmente nace como consultora, para poder guiar la obtención del equipamiento, capacitar a un maestro cervecero, entre otras cosas que podría necesitar una nueva cervecería. Ese año logré instalar cervecerías en todo Chile desde Iquique hasta Puerto Natales. Luego agregué el dictar los cursos para preparar certificaciones internacionales de cerveza. Básicamente, preparo a la gente para que rinda exámenes con instituciones internacionales de certificación: como el IBD de Inglaterra, y el BJCP en Estados Unidos.

 

– ¿Quienes componen este equipo que tienes hoy?

– Somos tres personas la verdad. Trabajo con una agencia de medios, otra de informática, y con ellos formamos un área de marketing, otra de contenidos y otra informática. Así funciona BrewDesign.

 

– ¿Existen otro tipo de instancias así en Chile o el mundo?

– Me atrevería a decir que fui pionero en esto, tal como lo fui en aprender más y capacitarme en el área cervecera en su momento. No existen estas preparaciones para certificaciones en línea en español, por ejemplo.

Se debe coordinar con los institutos internacionales, esta es una especie de “preuniversitario del maestro/juez cervecero”. Por eso es que hoy yo trabajo con dos cursos, primero con el IBD y luego el BJCP (para jueces). Estos involucran una parte más práctica, y yo entrego el conocimiento teórico, por así decirlo.

 

– ¿Es un trabajo colaborativo, de algún modo?

– Se trata de alianzas con ambos cursos, para coordinar las catas, por ejemplo, en cada caso. El curso de IBD es nuevo en español, poder preparar a los postulantes en su propio idioma abre nuevas oportunidades para la cervecería en Latinoamérica, y eso a través de BrewDesign. 

En cuanto al otro curso, BJCP, este es más antiguo y lo he dictado de manera presencial desde el 2014 en distintos países: Colombia, Perú, Panamá, Costa Rica, Ecuador, entre otros. Es muy demandado. Existe una articulación previa entre los institutos internacionales y yo para poder abrir esta posibilidad en español.

 

– ¿Cómo ha sido la recepción e interés en estos cursos en línea?

– Ha sido muy gratificante ver el interés que ha generado, para mí es una oportunidad de aportar en conocimiento y profesionalización del rubro, que es a lo que apuntan las certificaciones. Esto repercute en que se generen mejores productos y ha sido sorprendente para mi que llevo varios años en la industria. 

Y bien, sin duda este año me he dado cuenta de que el cervecero en este tiempo se ha dedicado a estudiar. La demanda de los cursos ha sido bastante.

 

– ¿De qué manera se ve el aporte de estas certificaciones que ayudar a guiar y preparar en la producción local, por ejemplo?

– Muchas cervecerías en Chile y Latinoamérica comenzaron siendo autodidactas, esto fue una tendencia de la cerveza artesanal a nivel mundial, lo que no es malo. Pero primero se hace la cerveza, y luego se dan cuenta de qué se puede mejorar en cuanto a calidad y otros ítems del proceso de fermentación. Toma más años llegar a tu producto final si no estudias antes, pero si lo haces, puedes ir más certeramente al producto que estás buscando. Finalmente todos terminan estudiando igual. Poder aportar en ese proceso se me hace extremadamente valioso.